sábado, 17 de julio de 2010

Una máquina de fracasar

Cuan un besugo desesperado, que aletea y coletea y filetea con todas sus fuerzas solo para llegar antes que el lenguado al próximo semáforo en rojo, hoy, el Mondiolandia Sporting Club, ha perdido la categoría, tras una lucha despareja en donde tres búfalos que ingresaron al campo de juego exhibiendo sus vergüenzas pudieron más que los miles de fanático que se habían quedado en la plaza de la esquinam, haciendo equilibrio sobre el subibaja ansiosos por conocer el resultado final.
De esta manera, y si bien creo haberme excedido un tanto al haber soñado con vos, así como hoy te veo en blanco y negro, mañana te veré en sepia, y pasado en Pal N, mientras le preguntas a tu vecina qué ruta seguir para llegar a Escobar, por ejemplo.
Tertulio se puso en la búsqueda insaciable del temible ladrón de tejas asesinas del más allá, para lo cual, siguendo la lógica de cualquier investigador que se precie, llamó al dueño de esa fábrica de plásticos de Benavídez, esa que se hiciera famosa en su oportunidad porque torturaba a los cartoneros que pasaban a llevarse los cartones (valga la redundancia) que el sistema descartaba y dejaba tirados en una zanja, viles desperdicios de un poema escrito con la pluma de un dodo hace ya miles de años, y que hoy llega a nuestras manos por la módica suma de un cargador de baterías de celular en desuso, haciéndoles escuchar esa canción que decía "si refresca por la noche, alguien me va a acompañar, la cual, tras ser traducida del arameo al griego, del griego al hebreo, del hebreo al sudanés, del sudanés nuevamente al arameo y de ahí al español, hoy en día deja oir (la discográfica lo niega, pero, como Hombre - Mondiola, estoy pletóricamente seguro de que es verdad) "Me regalaste un DVD regrabable para mi cumpleaños, sos un turro".
Y tras otra agotadora jornada de persecución de delincuentes y malhechores varios, hallo la paz en el fondo de una cajita de jugo de naranja con la imagen de Ben 10 en su portada, quien me mira amenazante, pretérito para tirarme una borla de fuego directo a los ojos, previo a extirparme el colon con una galleta marinera de agua dulce.
Eso es lo que ocurre cuando, en vez de ir al médico, decidimos autocurarnos empleando semicorcheas embebidas en aceite castrol pasado por agua de lluvia.-

lunes, 12 de julio de 2010

El Bache Clasista en el Asfalto de la Modernidad

Hete aquí que tu presencia está inconmensurablemente precedida por la llegada de los Testigos de Jehová a mi puerta. Indefectiblemente, cada vez que uno de estos monstruosos seres llegan con sus valijas repleta de salvación, y de preguntas a respuestas que nadie hará nunca, es que, cuan el aura que precede al pericón, los recovecos de la existencias vuelven a desandar el camino de los desarmaderos que existen al costado de la Ruta 202, entre José C. Paz y San Miguel.
A propósito, hay testigos de otras deidades que son menos altaneros a la hora de predicar sus dogmas. Sabido es, que, por ejemplo, los Testigos de Euclides, el Sagrado Calamar del Abismo Eterno son muchos mas cautos, y prefieren deicr "Ah, eso yo no sé, la verdad que no se decirte", antes que escupirte sus verdades a la hora de la siesta.
Pero volviendo al tema, maligna y villana como la que más, has dicho "Mirá, justo hoy pasé por Mondiolandia a robarme un surtidor, que andaba necesitando". Y, ahí, la hecatombe. Me considero el Matambre a la Pizza de la Justicia, pero también tengo sentimientos.
Dijo el maestro: "procede como la tos, que no expectora, o como el viejo adagio, que ya no reza, o como el rosedal de dos cabezas que no usa enaguas, sí cantimploras". Y aunque la alusión es bastante obvia para alguien con superpoderes como Tertulio, no es menor el detalle de que la alegría que viene en botella de plástico y que uno compra en el súper no se compara con la que uno puede hallar por la calle, a la vuelta de la esquina, como quien diría. Aunque, justo es reconocerlo, quizá sea más barata.
Si consideramos el hecho de que sos una vaca hecha de plástico, lógico es deducir que no podés haber ido muy lejos. Y anque quizá seas cubana, y tal vez, solitaria, nunca serás aquella.
El terrible hecho de mirar hacia el norte en espera de una revelación me ha hecho pensar por demás en un salón de fiestas infantiles (o "Pelotero", como dicen en Palermo Soweto) en donde la atronadora voz de Marilyn Manson canta "El sapo Pepe" a dúo con Marilina Ross durante siglos y siglos. Sin embargo, el viento trae un olor a chorizo recién bañado en alquitrán, que formará parte del elenco estelar en el Banquete del Señor.
Los hinchas del Kaiser Chiefs, en vez de cantar "Y cada día, te quiero más", entonan, envalentonados "Cada día te quiero menos y menos". Y se ríen.

lunes, 5 de julio de 2010

Una vida entera dedicada a la rotura de huevos

Sintió la tentación de decirle "Que linda que estás hoy", pero, sopesando los términos y condiciones, se dio cuenta de que tal expresión implícitamente estaba diciendo "El resto del almanaque sos un mamarracho impresentable!", por lo cual se la guardó antes de seguir generando situaciones dignas de un chiste del diario La Nación de un jueves, ponele.
"Si por cada vez que alguien pronuncia la palabra tararira en cualquier medio gráfico o de radiodifusión, se inflara un globo marca Tuki color violeta, la órbita terrestre variaría mas de lo imaginable", sentenció, en cambio. Una vez que hubo atraído la atención, y ya metido en el dichoso brete (a propósito, me pregunto si alguine sería capaz de decir "brete" sin rimarlo automáticamente con términos como "bonete", "falsete" o, lisa y llanamente, "entuerto") continuó: "Imaginaos que la fauna ictícola, fluvial y marina, de Mondiolandia, fuera como una banana... partida. Pues bien, nosotros estaríamos en el cabito de dicha banana. Aquí confluyen la mitad de los energúmenos del país, y nosotros los despedimos con un somero "adios, volved pronto", mientras que nuestras almas de telgopor se tiñen de banana y vuestras hermanas recogen el pasto muerto que la segadora va dejando a su paso...".
- "Vas bien", -penso- "... y ahora???"
-"Pues nada, que si fueras una pirámide, por cierto que no serías la de Keops, Kefrén ni Micerino", se respondió, dándose a la fuga.
Cuando el árbol de kerosén se extinga, ahi te quiero ver. Mientras tanto, tienes los cordones desatados por toda la galaxia.